Destruyó el arma, quemó sus ropas y tiró los zapatos.
En sus declaraciones ministeriales, el homicida confeso del periodista Santiago Barroso Alfaro, detalló paso a paso lo que hizo con las ropas que portaba el día del crimen, y con el revólver que usó para lavar su honor.
También reveló que hasta en dos ocasiones pidió al comunicador dejar de molestar a su esposa, pues el hostigamiento con mensajes y llamadas eran continuas e insistentes.
Cita en un párrafo de la declaración, que luego de una advertencia, Santiago le dijo que era un hombre poderoso y que al final se quedaría con su mujer y sus hijos.
Omar, quien ayer jueves en juicio abreviado aceptó una sentencia de 22 años de prisión sin el beneficio de libertad anticipada, dijo que tras el crimen del comunicador llego a su casa y se cambió de ropas.
Dio a conocer que llevó una gorra, una chamarra, camiseta, pantalón y zapatos a la parte posterior de su casa, para quemar las prendas en un asador.
Además de estas prendas, también incineró las plantillas de cartón que se fabricó para ocultar las huellas plantares, así como los trozos de las cintas adhesivas con las que se las ató.
Cabe mencionar que los restos de estas prendas los echó en una bolsa de plástico y los reservó, en tanto que se ocupaba del arma de fuego y el calzado.
Aun así, personal del laboratorio de investigación criminal encontró entre las cenizas del asador, partes de metal correspondiente a la chamarra, con lo que comprobó lo declarado por Omar.
En su declaración, Omar también dijo que el arma de pavón negro con chachas del mismo color, la seccionó en varias partes con la ayuda de una maquina cortadora de disco y que de igual manera la echó a una bolsa de plástico, junto con los casquillos.
Luego, con los restos de las ropas, del arma y los zapatos, se dirigió al canal encementado, ya que vive cerca del lugar, donde echó todo a las aguas.